... como este tema de la pelicula Orgullo y Prejuicio . Si. La de Jane Austen, la que tan mal nos ha hecho. Que ¿por qué? y, porque al leerla nosotras, mujeres liberadas, libres, independientes, seguimos deseando que llegue el caballero dorado a broncearnos la piel impoluta, piel de mucha razón y tan poco corazón. Esta música empieza sutil, discreta, desapercibida. Solo un chelo suavecito al que se le van sumando de prisa una orquesta imponente y aplastante que parece venir a rescatar al pobre chelo, como si necesitara ayuda, como si la necesitara. Como si con su tenor y minimalismo no pudiera hacerle frente solo a esta vida. Ahi viene la orquesta a ladrar no estas solo, soy yo, tu caracter, el que está para salvarte, tu impulso, tu arranque, tu defensa. Después se amanza la fiera. Demostrados los cojones le da rienda suelta, cataratamente, a la poesía que fluye, ahora en el piano, pero en serio que es catarata que va desde arriba y se larga. Como en la bajada del Chateau o en barrio ...